Retirada custodia a una madre por inducir a un menor de 14 años a no mantener contacto con el padre
04/03/2016
Con frecuencia nos encontramos con situaciones en las que, producida la separación de los progenitores, aquel que obtiene la custodia (mayoritariamente la madre) comienza a ejercer una fuerte influencia sobre el menor, posicionándole frente al otro progenitor. Es lo que se denomina síndrome de alienación parental.
Hace unos días, un juez de Torremolinos dictaba una sentencia por la que se retiraba a la madre la guarda y custodia del menor por considerar que indujo a este a romper la comunicación con el padre. El fallo incluye además el abandono por parte de la madre del domicilio conyugal, sin fijarse un régimen de visitas al menor.
Como suele ocurrir, los menores vuelven a ser los mayores perjudicados, llegándose a prever en la sentencia la posibilidad de consultar con expertos a fin de que el menor "y si llegara el caso incluso acordarse su ingreso en un centro adecuado de modo similar a la forma de proceder para desprogramar a un miembro de una secta".
Celebramos esta sentencia dado que se hace eco de una problemática muy común en los procedimientos de divorcio como es la alienación parental, siendo esta una línea en la que aún queda mucho camino por recorrer, pero estamos seguros que poco a poco y, gracias a resoluciones como esta, seguiremos avanzando.
No obstante, y siendo para nosotros los menores nuestra prioridad, no podemos dejar de recomendar a los progenitores que, acontecido el divorcio o la separación, intenten en la medida de lo posible no llevar a cabo conductas que puedan perjudicar a los menores, las cuales, en ocasiones, les pueden llegar a causar unos daños más severos de lo que imaginan.